¿Qué es un amigo? la respuesta te sorprenderá

En un mundo donde las redes sociales han formado parte casi esencial de nuestras relaciones, este fenómeno ha puesto una palabra muy significativa en una posición algo más “simplona” de lo que en verdad podría llegar a significar, esa palabra es “amigo”

Es interesante como socialmente esta palabra la hemos adoptado de forma más superficial, no digo que sea malo, después de todo no podemos ir por la vida llamando a la gente que conocemos “hola desconocido” o “hola no tan amigo”, para el cristiano es un poco más fácil ya que tenemos la palabra “hermano” para referirnos a compañeros en la fe que no necesariamente sean muy cercanos a nosotros pero que si hay un respeto y cariño por ellos

Pero ¿Qué significa la palabra amigo en verdad? ¿puede la cultura bíblica acercarnos a una mejor comprensión de esta palabra y lo que la envuelve?, claro que si

Pongámoslo así, si un judío va y te pide que le presentes a un “amigo” tuyo probablemente él te dirá “bien, este “amigo” tuyo ¿conoce tu casa? ¿comparte con tu familia? ¿celebra justo a ti tus hitos importantes? ¿conoce detalles de tu vida que pocos conocen? ¿llora contigo y se ríe junto a ti? ¿pondrías las manos al fuego por su testimonio? ¿él lo haría por ti?” y probablemente muchas preguntas más, cada una más comprometedora que la otra

Si no cumple con alguna de estas condiciones el judío dirá “no es tu amigo, solo es un conocido”, y es que, para el judío desde tiempos bíblicos, el termino amigo (חבר) tiene un significado profundo y, para una sociedad algo frívola como la nuestra, impactante, “amigo” para un judío es como decir “el hermano que yo elegí”, no el que la genética escogió por mí, no el que la familia me dio, el que yo escogí

De ahí esas palabras tan fuertes de Proverbios 17:17

“En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia.”

Ya sabes, la próxima vez que uses la palabra “amigo” con alguien estas dando una verdadera declaración de incondicionalidad hacia esta persona, tal vez con esto te des cuenta de que no has dado la importancia necesaria a aquellos que de corazón llamas “amigos” después de todo, ellos son los hermanos que tu elegiste